Organización, Parte 1 (3)

Entre los propositos de año nuevo ha estado organizarme.

No lo he tenido fácil, es una lucha sin cuartel de años, Einstein decía "no perdaís nunca vuestra bendita curiosidad", y creo que ese ha sido mi "problema": tengo una curiosidad absolutamente insaciable, pantagruélica, y el caso es que me recuerdo así desde niño, creo que no tenía más de 13 o 14 años cuando empezé a recortar cosas que me interesaban de los periódicos, de revistas, de documentos, folletos, etc. Pronto, para no convertir la casa en un basurero, necesite un archivador -de esos de oficina y tres grandes cajones- que todavía conservo. En casa me llaman "picadillo", cuando me ven con algo de prensa, dicen "cuidado la tiene picadillo", porque dicen que hago "picadillo" todo lo que cae en mis manos.

La llegada de internet, con su flujo incesante de información no le hizo bien a mi curiosidad ;-)
Hace ya años que uso, con la pasión de un coleccionista conpulsivo, delicious, mi cuenta allí ya se acerca a los 15.000 enlaces, todos con sus notas, y con mi sistema propio de etiquetado, que probablemente solo yo entiendo -mi "fuzzy tagging logic"- pero que me permite encontrar en un instante aquel link sobre un tema en particular que me interesó, o crear colecciones -"linkografías"- sobre un tema en particular para el trabajo, para amigos, para la iglesia...

Tengo un problema también con las ideas, se me van cayendo por las esquinas, y no las dejo de anotar, empeze por los papelitos, servilletitas, folios, que iba metiendo en cajas, luego las organize por asuntos en sobrecitos de plástico convenientemente etiquetadas. Como empezáis a comprobar tengo una mania obsesiva con el orden, me desespera no encontrar algo, o perderlo.

Con las cosas del Señor también me ha pasado, hay un pasaje en el libro de Samuel, después que Elí le ha enseñado como escuchar la voz de Dios, "habla Jehova, tu siervo escucha", dice la Palabra que el Señor siguió hablando: "Y Samuel creció, y Jehová estaba con él, y no dejo caer a tierra ninguna de sus palabras". Eso es algo que está en nuestras manos, el Señor sigue dandonos ideas, proyectos, palabra para su pueblo, y está en nuestra mano "no dejar caer a tierra ninguna de sus palabras", algunos de esas cosas son para ahora, para otras muchas Él tiene su tiempo, que poco tiene que ver con el nuestro. Los que me conocen saben que no salgo de casa sin un bloc de notas o una moleskine.

Esa ha sido otra de las razones para retomar el escribir, pues el agua que no fluye se estanca, y lo que no se comparte se "agusana", el Señor ha sido bueno conmigo, y no quiero dejar de oir su voz por mi indolencia en el compartir.

Y por hoy es suficiente, mañana os compartire de algunos trucos que uso para organizarme, algunas herramientas, y cosas que me han sido útiles.

Actualización:
La serie completa:
1. Organización, Empezando
2. Organización Parte 1
3. Organización Parte 2, Herramientas