“Por la fe Abraham siendo llamado, obedeció par salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba” Heb. 11.8
“salió sin saber a dónde iba” que difícil... y a veces eso es lo único que el Señor nos mostrara: el principio de un camino cuyo recorrido desconocemos absolutamente... cuan complicado nos resulta, que poco nos gusta, y sin embargo, Él quiere saber si verdaderamente confiamos, si verdaderamente es nuestro reposo y fortaleza, Él sabe que ya reconocemos su voz... ¿Estamos dispuestos a seguirla? ¿Afirmaremos la mano en el arado? ¿Pagaremos el precio?
Sabemos que nuestro Señor ha dejado huellas y pisadas para que las podamos seguir (1 Ped. 2.21), sabemos que si Él pasa delante, nada hemos de temer... no se turbara mi corazón.
Cuan acertada es tu apreciación. La clave es dejarnos usar por nuestro Dios, aunque no entendamos su propósito al seguir su llamado, con la convicción que estamos realizando su voluntad.
ResponderEliminarTodos nosotros hemos emprendido faenas impulsadas por diferentes motivos y que no siempre han tenido el resultado que esperábamos, sin embargo, Dios nos puede usar, aun cuando enfrentamos el desaliento y hasta el fracaso desde el punto de vista humano.
El plan esta trazado, sigamos la voz del Maestro.